La nutrición durante el cáncer y los problemas de hígado

Hoy hablaremos de la “disfunción hepática” o también llamada insuficiencia hepática o fallo hepático, que es la incapacidad del hígado de realizar sus funciones normales. Con esta disfunción se producen los famosos síntomas de piel y ojos amarillos (ictericia), dolores en el abdomen, náuseas y vómitos.

Descubre cómo la disfunción hepática puede afectar a los pacientes con cáncer y cómo la nutrición adecuada puede marcar la diferencia en su tratamiento. El hígado es un órgano vital en nuestro cuerpo que desempeña múltiples funciones esenciales para mantenernos saludables. Algunas de estas funciones son:

La Función sintética: el hígado es responsable de producir proteínas esenciales para el cuerpo, como factores de coagulación necesarios para detener el sangrado en caso de una lesión. También sintetiza albúmina, una proteína que mantiene el equilibrio de líquidos en el cuerpo.

Función excretora: el hígado elimina productos de desecho, como la bilirrubina y el colesterol, de la sangre y los excreta a través de la bilis, que luego se elimina en las heces. Esta función es crucial para mantener niveles adecuados de estas sustancias en el cuerpo.

Función metabólica: el hígado está involucrado en el metabolismo de carbohidratos, proteínas y grasas. Regula los niveles de glucosa en sangre y almacena glucógeno, una forma de energía que el cuerpo puede utilizar cuando sea necesario.

Función depuradora: filtra los fármacos y toxinas del torrente sanguíneo, desempeñando un papel importante en la desintoxicación del cuerpo.

El almacenamiento de nutrientes: el hígado almacena vitaminas y minerales esenciales, como las vitaminas A y D, así como hierro, que son liberados en la sangre según las necesidades del cuerpo.

Disfunción hepática, ¿Qué causas y consecuencias produce?

La disfunción hepática es la incapacidad del hígado para llevar a cabo adecuadamente estas funciones vitales. Puede ser causada por diversas razones, incluyendo:

  • Uso de drogas hepatotóxicas: algunos medicamentos pueden dañar el hígado, lo que es especialmente relevante para los pacientes con cáncer que están en tratamiento.

  • Antecedentes de alcoholismo o hepatitis: el consumo excesivo de alcohol y las infecciones virales, como la hepatitis, pueden dañar el hígado a lo largo del tiempo.

  • Tumores que alteran las vías biliares: los tumores que bloquean las vías biliares pueden causar acumulación de bilis en el hígado, lo que afecta su función.

  • Tumores hepáticos y metástasis hepáticas: los cánceres hepáticos primarios o las metástasis hepáticas pueden dañar directamente el tejido hepático.

Es esencial abordar la disfunción hepática en pacientes con cáncer, ya que puede tener un impacto significativo en el tratamiento y la calidad de vida.

Nutrición esencial para pacientes con disfunción hepática

La nutrición juega un papel fundamental en el manejo de la disfunción hepática en pacientes con cáncer. Aquí se detallan algunas recomendaciones vitales:

Alimentación balanceada, ¿Es la clave?

Una alimentación equilibrada es esencial. Se recomienda dividir las comidas en 5-6 porciones al día y evitar el ayuno prolongado, ya que esto puede ayudar a mantener niveles de energía estables y prevenir la pérdida de masa muscular.

Proteínas vegetales: tu aliado en la lucha contra el cáncer

Priorizar las proteínas de origen vegetal, como las que se encuentran en la soya, las menestras, los cereales, los granos andinos y los frutos secos, es fundamental. Estos alimentos son ricos en aminoácidos ramificados y bajos en aminoácidos aromáticos, lo que beneficia a los pacientes con disfunción hepática.

Restricciones en la dieta: lo que debes evitar

Debes reducir el consumo de alimentos de origen animal, especialmente las carnes rojas y las vísceras. El alcohol también debe evitarse. Controlar la sal es importante para mantener un equilibrio adecuado de líquidos en el cuerpo.

Control de la sal ¿Es importante para tu bienestar?

El consumo de sal debe ser moderado (no más de ½ cucharadita al día) para prevenir la retención de líquidos y mantener la salud cardiovascular.

Una dieta bien planificada puede ayudar a aliviar la carga del hígado y promover una mejor calidad de vida para los pacientes con cáncer y disfunción hepática.

Recomendaciones para pacientes con sondas enterales

Fórmulas Nutricionales: las fórmulas nutricionales son una excelente opción. Estas fórmulas están diseñadas específicamente para satisfacer las necesidades nutricionales de aquellos con problemas hepáticos y pueden ser

Conclusiones

La nutrición desempeña un papel fundamental en el manejo de la disfunción hepática en pacientes con cáncer. Mantener una dieta equilibrada y segura es esencial para el éxito del tratamiento.

Las recomendaciones y datos incluidos en este blog no pretenden sustituir los consejos de su médico y/o nutricionista clínico. El autor (Joan Zamora) no se responsabiliza de las posibles consecuencias de la mala aplicación de esta información. La recomendación del autor es que usted acuda a un profesional sanitario cualificado. Los únicos profesionales cualificados para proporcionar programas dietéticos nutricionales son los propios graduados / diplomados universitarios en nutrición humana y dietética y el médico especialista endocrino. Cualquier otro profesional sanitario o persona que le diga lo contrario realiza intrusismo y carece de los conocimientos necesarios. Le recomiendo que no ponga en peligro su salud ni su confianza, apoye la nutrición personalizada y de calidad.

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